Como es el proyecto para transformar la ribera de Quilmes
09 de octubre de 2017
El plan es ambicioso y contempla una multiplicidad de intervenciones: obras de infraestructura para resolver el problema de las inundaciones, embellecimiento y puesta en valor de los espacios públicos, mejoramiento de la conectividad y construcción de áreas verdes.
Con esta proyección de obras, Martiniano Molina, intenta jerarquizar un lugar emblemático de la ciudad que ha caído en el olvido durante décadas. El plan es ambicioso y contempla una multiplicidad de intervenciones: obras de infraestructura para resolver el problema de las inundaciones, embellecimiento y puesta en valor de los espacios públicos, mejoramiento de la conectividad y construcción de áreas verdes.
La recuperación integral de la Ribera es uno de los pilares del Plan de Obras 20/17 que lleva adelante el intendente Martiniano Molina en Quilmes, con el apoyo del presidente Mauricio Macri. Se trata de jerarquizar un lugar emblemático de la ciudad que ha caído en el olvido durante décadas.
El proyecto es ambicioso y contempla una multiplicidad de intervenciones: obras de infraestructura para resolver el problema de las inundaciones, embellecimiento y puesta en valor de los espacios públicos, mejoramiento de la conectividad y construcción de áreas verdes.
"Con el conjunto de estas obras transformaremos definitivamente la Ribera, jerarquizándola, mejorando su infraestructura y la calidad de vida de sus habitantes. Además, se crearán fuentes de trabajo genuinas y nuevos polos de desarrollo en la ciudad y para toda la región", sostuvo el jefe comunal.
Obra hídrica
Generar las condiciones de infraestructura básica para un desarrollo urbano sustentable es la clave del proyecto. En este sentido, se planificó la ejecución de trabajos hidráulicos en Otamendi e Iriarte, desde la autopista hacia el río. La intervención incluye dos conductos de grandes dimensiones —3 metros de ancho por 2 metros de alto— y la red secundaria que abarcará toda la zona urbanizada de la Ribera.
La obra se realizará a través del Fondo Hídrico. Los proyectos están aprobados. El equipo técnico de la Secretaría General, área que impulsa la iniciativa, detalló que en el caso de Otamendi ya está en marcha el proceso de licitación; mientras que Iriarte se encuentra en agenda para firmar el convenio.
Estiman que serán 45 mil los vecinos beneficiados directamente por esta obra hídrica, a la que Martiniano Molina definió como "inédita" por la magnitud del trabajo y el alcance que tiene.
Mejoras urbanas en los ingresos a la Ribera
La renovación de Iriarte, desde Mozart hasta el río, y de Otamendi, desde Cevallos hasta el río, ya está en proceso de licitación. Los trabajos incluyen luminarias, refugios para colectivos, parquización, puestos de seguridad, bicisendas, semáforos, desagües, juegos, aparatos de gimnasia y demarcación vial de cada avenida y su entorno. Se trata de obras que mejorarán la conectividad y el acceso a la Ribera.
Al respecto, Molina indicó: "La conectividad es una de las herramientas fundamentales para el desarrollo urbano y territorial de la región. Por eso, resulta esencial llevar adelante políticas de movilidad coordinadas con las de desarrollo urbano invirtiendo en infraestructura, mejorando la seguridad, su accesibilidad y disponibilidad".
Espacios verdes
Otra de las iniciativas es la puesta en valor del Paseo de los Ginkgos y la construcción de un Gran Parque Costanero para recuperar el borde costero de Quilmes. "Esta obra significará un gran espacio para el disfrute, esparcimiento y descanso de los vecinos", aseguró el intendente. Los trabajos contemplan la consolidación de su perímetro, la construcción de extensas áreas verdes con arbolado y plantación de flora nativa, mobiliario urbano e iluminación.
Paseo costanero
La propuesta de recuperación integral de la Ribera contempla la planificación y ejecución de distintos proyectos para que en las próximas etapas se mejore todo el frente costero, incluyendo el muelle de pescadores.
"Estamos impulsando esta iniciativa para recuperar de manera integral nuestra querida Ribera, un lugar histórico y que tanto tiene que ver con la identidad de los quilmeños", resumió Molina. Y añadió: "Nos duele el estado de abandono total en que se encuentra y que es resultado de años de desidia, por eso tomamos la decisión política de lograr una verdadera transformación a partir de obras que son necesarias y que mejorarán la calidad de vida de los vecinos. Nos acompañan en esta tarea tanto Nación como Provincia, así que estamos sumamente agradecidos y tenemos muchas expectativas".