Diputados puso fecha para el debate sobre la suspensión de las PASO
29 de enero de 2025
En una reunión en el despacho de Martín Menem con diputados de la oposición, los funcionarios José Rolandi y Lisandro Catalán confirmaron que el principal objetivo de Javier Milei en estas sesiones extraordinarias radica en eliminar o suspender las PASO. Confiados de tener los votos, anuncian una sesión para el jueves 6 de febrero. Ficha Limpia pasa a un segundo plano.
Los diputados que salían del despacho de Menem, tarde a la noche, se mostraban sorprendidos: pese a la dilación de la convocatoria, pese a la dificultad que representa sumar 129 voluntades para avanzar con una reforma electoral, pese a la resistencia de muchos de sus aliados, el Gobierno nacional se mostraba confiado en que tenía el número para barrer con las PASO. Al menos por este año. Y sin necesidad —o al menos así lo daban a entender a su opo friendly— de tenderle la mano al peronismo.
De la reunión habían participado casi todos los bloques, excepto Unión por la Patria y el PRO. Aunque por motivos distintos: mientras los primeros, en tanto oposición dura, nunca son convocados a las reuniones con funcionarios del gobierno libertario, el PRO ya había cerrado hace tiempo su compromiso con Milei. El partido amarillo le había dado su OK a suspender las PASO y aprobar un proyecto de Ficha Limpa que no tenía firma de Silvia Lospennato hace más de una semana, luego de una reunión con Guillermo Francos.
La reunión del martes, en cambio, apuntaba a seducir a los indecisos, a esos bloques opositores que suelen acompañar al Gobierno pero que venían pegando un grito al cielo por la ausencia de la sanción del Presupuesto. Originalmente iban a ir unos pocos, pero el encuentro se terminó volviendo multitudinario. Estaban todas las variantes del radicalismo: desde el deloreísmo oficialista, con referentes como Karina Banfi y Soledad Carrizo, hasta el radicalismo díscolo liderado por Pablo Juliano. Estaban, incluso, los radicales ultramileistas Mariano Campero y Pablo Cervi.
Los gobernadores también habían dado el presente. Entre los diputados que les responden directamente estuvieron el misionero Carlos Fernández, el rionegrino Agustín Domingo, la sanjuanina Nancy Picón, el neuquino Osvaldo Llancafilo y el santacruceño José Garrido. No estuvo, en cambio, la salteña Pamela Caletti, representante del gobernador Gustavo Sáenz cuya postura respecto de la eliminación de las PASO aún no está clara.
De la Coalición Cívica estuvo Maximiliano Ferraro y de parte de Encuentro Federal asistieron su titular, Miguel Ángel Pichetto, y Oscar Agost Carreño. Fueron quienes abrieron el debate en torno a la falta de Presupuesto: el único de los temas álgidos de la reunión. Empezó cuando Rolandi se puso a explicar la necesidad de aprobar su proyecto de actualización de quebrantos impositivos —un beneficio impositivo a las empresas que sufrieron pérdidas que formaba parte del texto de Presupuesto 2025— cuando Pichetto lo interrumpió: “Dale Rolandi, ustedes voltearon el Presupuesto y ahora deciden qué poner y que no”, cuestionó, dando inicio a una ola de recriminaciones de todos los bloques por la negativa del Gobierno nacional a tratar el Presupuesto en extraordinarias.
Los emisarios del Poder Ejecutivo, Rolandi y Catalán, apenas si pudieron explicar la ausencia del tema, acusando a los gobernadores de exigir modificaciones “que generarían déficit fiscal”. Pasó un tiempo hasta que se logró encauzar la conversación hacia lo que verdaderamente le interesaba a la Casa Rosada: que no haya elecciones primarias en agosto.
“Nuestra prioridad son las PASO”, afirmó y repitió Catalán, mano derecha de Francos, en la reunión. Insistió con la eliminación, pero ante las objeciones de casi todos los bloques concedió que se podía acordar una suspensión para 2025. Insistió también con toda la reforma política, que modifica el régimen de financiamiento de los partidos políticos y las campañas, pero no hubo manera: ningún diputado, excepto los radicales más mileístas, tenía interés en tratar el tema. Era suspensión de las PASO o nada.