El Gobierno hizo caer el proyecto de ficha limpia para perjudicar al PRO
08 de mayo de 2025
El oficialismo no logró la mayoría absoluta en el Senado y quedó trunco el proyecto de Ficha Limpia, que podrá volver a ser tratado recién en 2026.
Es preciso mencionar que, con el rechazo del Senado, el proyecto de Ficha Limpia, que había sido pensado originalmente por la diputada del PRO, Silvia Lospennato, no podrá ser tratado nuevamente por ninguna de las dos Cámaras que integran el Congreso por lo menos hasta que comiencen las sesiones extraordinarias u ordinarias del 2026.
Durante el extenso debate que duró diez horas, los senadores dejaron en evidencia las tensiones entre La Libertad Avanza y el PRO, especialmente por la autoría del proyecto y las disputas internas en la Legislatura porteña. Es que, Lospennato, autora original de la iniciativa, no fue autorizada a presenciar el debate desde un palco en el Senado, lo que reflejó las fricciones entre ambos espacios políticos.
Asimismo, el rechazo del proyecto de Ficha Limpia generó fuertes reacciones. En principio, el Presidente expresó su descontento en redes sociales, calificando al Senado como “el refugio de la casta”, mientras que el vocero presidencial y candidato a legislador porteño, Manuel Adorni, afirmó: “Ahora más que nunca: es kirchnerismo o libertad. Fin”.
Por su parte, la diputada Lospennato, que vio la votación en la Cámara alta desde el estudio de un canal televisivo en vivo, lamentó la caída del proyecto de Ficha Limpia en el Senado, y advirtió que “los corruptos deben estar festejando un año más de impunidad para cargos electivos”.
Es preciso recordar que, el proyecto de Ficha Limpia había sido aprobado en la Cámara de Diputados en febrero con 144 votos a favor, 98 en contra y 2 abstenciones, con una iniciativa que establecía que no podrían postularse a cargos públicos aquellas personas con condenas por delitos de corrupción confirmadas por un tribunal de segunda instancia, como Cristina Kirchner en la causa Vialidad.
Entre los delitos incluidos en el proyecto del oficialismo se encontraban cohecho, malversación de caudales públicos, enriquecimiento ilícito y encubrimiento, aunque durante el debate de este miércoles en el Senado el oficialismo y el PRO no aceptó incluir otros ilícitos solicitados por una legisladora de Unión por la Patria, como la pedofilia, los homicidios o el narcotráfico.
Por caso, el rechazo en el Senado fue interpretado por el Partido Justicialista como un freno a un intento de proscripción política contra la expresidenta Cristina Kirchner, quien fue condenada en segunda instancia en la causa Vialidad en 2023. “Buscan ensuciar la voluntad popular con un nuevo intento de exclusión política”, escribieron en las redes del PJ.
Sin embargo, este miércoles el peronismo logró un nuevo triunfo, ya que con este resultado el proyecto de Ficha Limpia pierde estado parlamentario y deberá esperar hasta el próximo período legislativo para ser reconsiderado y debatido en ambas cámaras. Mientras tanto, las tensiones entre los distintos espacios políticos continúan, evidenciando las profundas divisiones en torno a la lucha contra la corrupción y la transparencia en la política argentina.
Mi conferencia de prensa sobre Ficha Limpia. pic.twitter.com/qV7NdKT3ax
— Silvia Lospennato (@slospennato) May 8, 2025
Ficha Limpia: los votos claves que permitieron el rechazo
Es preciso mencionar que, el rechazo del proyecto en el Senado estuvo marcado por dos actores claves: los votos negativos de los senadores misioneros Carlos Arce y Sonia Rojas Decut. Aunque no forman parte del bloque kirchnerista, ambos legisladores decidieron oponerse a la iniciativa, lo que resultó determinante para que la ley no alcanzara la mayoría simple requerida.
El resultado final fue de 36 votos afirmativos y 35 negativos. Sin embargo, el oficialismo necesitaba 37 apoyos para lograr la aprobación del escrito. La postura de los misioneros, que hasta último momento fue incierta, desactivó las expectativas del Gobierno y el PRO para poner en vigencia la ley.
La importancia de estos dos votos radica en que la mayoría de los bloques no kirchneristas ya habían manifestado su respaldo al proyecto. La Libertad Avanza, el PRO, la UCR y otros espacios aliados sumaban los números necesarios sobre el papel. No obstante, las tensiones internas, los desacuerdos de autoría entre los libertarios y el PRO, sumado al desacople de los legisladores misioneros dejaron en evidencia que el apoyo no era tan sólido como se creía.
La negativa de los misioneros fue una jugada política de alto nivel, que cruzó diagonales entre el peronismo y la Casa Rosada. Dejó a Macri y a su candidata Silvia Lospennato como los grandes derrotados, además de enviarle a los grandes medios y parte del establishment el mensaje que la política tiene autonomía para darse sus propias reglas. Milei consiguió reflotar su pacto con el kirchnerismo para que no interpelen a su hermana por el caso Libra.
Durante toda la jornada, el oficialismo se encargó de dar muestras que trabajaba para que la ley saliera, en sintonía con sus aliados del PRO, la UCR y los grandes medios. Pero eran gestos para la tribuna libertaria. Por abajo, el gobierno trabajó a destajo para voltear la ley o al menos demorarla, explorando la voluntad de algún radical que pidiera modificaciones y eso prolongase el trámite legislativo devolviendo el expediente a Diputados. Una manera de lograr que no se sancione este año, sin pagar el costo de aparecer avalando a la casta.