El Gobierno trabaja en un acuerdo de 10 puntos con empresarios y sindicatos para impulsar inversiones y empleo
11 de noviembre de 2021
Impulsarán un acuerdo para que haya una convergencia fiscal sin ajustar la economía, incentivar le empleo y atraer inversiones. Deberá pasar por la aprobación del Congreso
El presidente Alberto Fernández y su ministro de Economía Martín Guzmán mantuvieron este martes un encuentro con representantes de empresas multinacionales de distintos sectores
El foco de la conversación estuvo puesto en la necesidad de construir un acuerdo para que haya una convergencia fiscal sin ajustar la economía, intensificar la lucha contra la evasión, incentivar la generación de empleo, promover carreras cortas con salida laboral y generar un ambiente propicio para atraer inversiones. Buscarán consensuar diez puntos con empresas y sindicatos y luego lo enviarán al Congreso.
Se centraron en la necesidad trabajar en un acuerdo social que se buscará discutir en el parlamento después del 14 de noviembre, más allá de cuál sea el resultado de las elecciones
Esa iniciativa constaría en un principio de diez puntos, entre los que estarían la convergencia fiscal sin producir un ajuste en la economía, la necesidad de reorientar los subsidios hacia un esquema más eficiente y progresivo e intensificar la lucha contra la evasión impositiva.
En ese consenso, se mencionó la inclusión de incentivos para la generación de empleo incremental, la promoción de un esquema educativo que incluya carreras cortas con fácil salida laboral en sectores vinculados a la economía del conocimiento entre otros y favorecer un escenario de atracción de inversiones en rubros estratégicos.
El ministro de Economía Martín Guzmán se refirió a la negociación con el Fondo Monetario Internacional y aseguró a los empresarios que no habrá default. Incluso, anticipó que podría haber un acuerdo a comienzos del año que viene, antes de marzo. El funcionario hizo hincapié en la importancia de que el organismo revise la política de sobrecargos en las tasas, ya que eso implicaría un ahorro de u$s 900 millones anuales que podrían aplicarse a mejorar la infraestructura del país.
Por otro lado, Guzmán resaltó que el centro de la renegociación hoy pasa por garantizar que el pago de la deuda se va a llevar adelante con lo que se genere a partir del crecimiento económico. Es decir que el programa debe ser impuesto desde Argentina y tiene excluir toda posibilidad de un ajuste continuo.
Las empresas se llevaron una buena impresión del planteo que hizo el Gobierno. Esperan ahora a una próxima convocatoria donde estén presentes los representantes de los sindicatos en la que se empezarán a delinear en limpio los diez puntos de consenso que serán enviados al Congreso.