La economía al tope de las preocupaciones de los argentinos
04 de enero de 2018
Un trabajo de CEOP demuestra que, para el 70% de los argentinos, la economía es la principal preocupación.
“Un viejo desafío ha regresado –sostiene Roberto Bacman– otra vez la maldita economía”. Es que si se mira la tabla de preocupaciones de los argentinos, la economía volvió a trepar, lejos, al primer puesto. Nada menos que el 71,3 por ciento de los encuestados afirma que es su principal preocupación.
“Desde mediados de diciembre se fue reinstalando como el gran problema de los argentinos –redondea el titular del CEOP–, con un crecimiento impactante mes tras mes. Y al menos, a la luz de estos resultados parece imparable. No debe sorprender a nadie que algo más de siete de cada diez argentinos terminan el año preocupados por la economía. Una mirada más profunda nos permite detectar que específicamente lo que más los desvela son tres factores: una percepción importante apunta a concluir que lo que se gana no alcanza para llegar a fin de mes, la inflación (otra vez la tan temida inflación) con fuerte tendencia al crecimiento y además una sensación de que la marcha de economía posee un rumbo impredecible. En síntesis, se han encendido todas las luces de alerta con respecto a la economía”.
Si se mira la tabla de preocupaciones, hoy la inseguridad está más de 30 puntos por debajo de la economía, cuando en épocas del kirchnerismo solía estar 20 puntos por arriba. Lo llamativo es que los índices delictivos no parecen haber cambiado para mejor, sino más bien lo contrario. Según los datos oficiales de la procuración bonaerense el delito subió cuatro por ciento en 2016.
Aún así, la economía está en el centro de la escena, sobre todo en base a lo señalado por Bacman, las dificultades para llegar a fin de mes. El brutal aumento en las tarifas y los aumentos de sueldos por debajo de la inflación son los ingredientes fundamentales. Pero, además, los jubilados (parte sustantiva en cualquier encuesta) terminan el año con gravísimas preocupaciones económicas, no sólo por el recorte que se avecina, sino por los aumentos desproporcionados en los medicamentos y la reducción en las prestaciones del PAMI. En ese marco, no es casualidad que la economía se haya disparado como principal problema.