La importación de 10 millones de kilos de tomates italianos, el dato que preocupa a empresarios
07 de marzo de 2018
Enfurecidos, los empresarios salieron al cruce de la política de importación de buenos modales que encaró Argentina con el objetivo de seducir a la Unión Europea para alcanzar un acuerdo de libre-comercio con el Mercosur.

Consultado sobre las críticas que recibe la Casa Rosada por el rumbo económico y productivo del país, el ministro de Producción Francisco Cabrera resumió: "Algunos dirigentes empresarios se quejan en lugar de tener una agenda seria y adulta de competitividad".
Al aire de radio Mitre, el pasado sábado 3/03, Cabrera, quien debiera trabajar para enfriar el índice de inflación, cerró las puertas a la autocrítica y se posó sobre un mensaje populista, alejado de la realidad que atraviesan las economías regionales (PYMES): "El Presidente es muy realista y conoce, como todos nosotros, los procesos, las razones y la historia de la producción y la industria en la Argentina. Creemos que hay que tener una agenda positiva y dejarse de llorar. Hay que ganar nuevos mercados y competitividad. El Gobierno tiene siempre las puertas abiertas, pero lo que no vamos a hacer es castigar a todo el pueblo argentino para enriquecer a empresas grandes".
Sin embargo, Adrián Kaufmann Brea, presidente de la Cámara de Industriales de Productos Alimenticios (CIPA), vicepresidente de la Unión Industrial Argentina (UIA) y gerente de Relaciones Institucionales de Arcor, reveló el informe que abrió el fuego:
"El inicio, en realidad, de este tema fue la primera reunión de junta de la Unión Industrial, que fue el martes pasado (27/02), en donde, como es habitual en la primera reunión (del año), dan un informe de cada uno de los sectores, luego de 3 meses de no vernos.
Había un poco más de 70 personas de distintas regiones del país.
En mi caso en particular, como representante de la Cámara de Productos Alimenticios, de Córdoba, entre otras cosas, comenté la preocupación por las producciones regionales y el ingreso de tomate entero de Italia.
Incluso, la asociación 'Tomate 2.000' publicó datos todavía superiores que los que yo había mencionado: en 2015 teníamos un ingreso de 150.000/180.000 kilos y el año pasado terminamos con 10 millones de kilos.
Entonces, si vos trasladás eso a volúmenes en latas, tenías 530.000 en 2015 a casi 29 millones el año pasado. Ya viene directamente envasado de Italia pero después se pasan a nombres de empresas locales.
Pero acá podríamos dar el dato también de los choclos que están entrando de Brasil.
Pensá que el precio de una lata de San Juan, terminada, es de $6,50 y la gente lo ve en la góndola a $20. Solamente, el 40% de ese valor son impuestos. El 35% es traslado.
El problema está en la importación en volúmenes considerables. Por eso, se están pidiendo precios de referencia en Aduana porque las economías regionales se están perjudicando mucho.
Lo que está ocasionando es una reducción en la producción de la capacidad instalada. Un informe de la COPAL (Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios) dice que la capacidad instalada de alimentos y bebidas cayó del 2016 al 2017, del 9% al 61%. Estamos hablando de la industria más competitiva y que lo que está ingresando representa un 30% de la producción nacional.
Lo que preocupa también es la capacidad de financiamiento.
Realmente, no me siento aludido por lo del ministro, porque no creo que se haya referido a esta situación, aunque no sé a qué se refirió.
No me voy a dar por aludido porque ni lloramos ni es verdad que no seamos competitivos ni es verdad que no sepamos competir. Esta es una industria que ha llegado a exportar latas de tomates hasta a Japón, un país muy complejo para acceder al mercado de alimentos. Ni hablar de Europa y Estados Unidos.
Y esos productos están llegando de Italia, donde las industrias reciben millones en subsidios que, para no perder los subsidios, no quieren el acuerdo con el Mercosur, entre otras cosas.
Entonces, la industria conservera obtiene el cobro de ese producto recién a los 9 meses, por lo cual ya no luchan por vender sino por subsistir", remarcó al aire de radio Milenium este martes 6/03.