Según reportó el boletín oficial de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el ex intendente fue designado personal de Planta de Gabinete de la Unidad Ministro del Ministerio de Desarrollo Económico y Producción.

Su nuevo cargo quedó bajo el Ministerio de Desarrollo Económico que conduce José Luis Giusti. La gastronomía es uno de los principales sectores económicos de la Ciudad y desde el gobierno porteño destacan el rol de Molina como "embajador". Explican que la intención es "no solo potenciar los productos locales sino de todo el país" y allí comenzará a tallar Martiniano.

Molina fue uno de los intendentes macristas que no pudo reelegir y tuvo que dejar la intendencia de Quilmes. El chef, sin embargo, obtuvo el 43% de los votos, una cifra nada desdeñable en uno de los municipios más grandes del conurbano.

La intención es que más allá de su cargo formal, el ex intendente de Quilmes tenga roce con dirigentes de todo el país como parte del armado presidencial de Horacio Rodríguez Larreta.

El jefe de gobierno porteño replicará el modelo aplicado por Mauricio Macri con las "Casas de la Ciudad" que le permitieron nombrar "embajadores" porteños para todo el país, vincularse con productores y dirigentes.

Molina llega al gobierno porteño en calidad de asesor y trabajará con Héctor Gatto, un funcionario que responde a Santilli y está a cargo de la Subsecretaría de Bienestar Ciudadano.

Durante la pandemia Molina mantuvo un perfil bajo, pero ahora vuelve aparecer en escena de la mano de Horacio Rodríguez Larreta. Aunque aún falta para definir candidaturas, la campaña de la oposición en la provincia de Buenos Aires ya comenzó a moverse con recorridas, encuentros y guiños varios de diferentes referentes, y la "grieta" ala dura / ala blanda de por medio. La reciente designación también puede leerse en este contexto preelectoral. Se especula con que este año Molina podría competir en las elecciones de medio término por una banca en la Cámara de Diputados bonaerense.