El Gobierno salió a bajar una escalada conflictiva con los gremios y trabajadores y negó estar trabajando en una reforma laboral para después de las elecciones y concentra sus reclamos en una modificación impositiva en la que trabaja el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne.

Su par de Producción, Francisco Cabrera, sostuvo que “no hay reforma laboral prevista” e hizo hincapié en la reforma tributaria que será para “modernizar y favorecer la inversión”. A pesar de negar que Cambiemos trabaje en una reforma laboral por el momento, Cabrera pidió apuntar a “tener discusiones con el sector el trabajo respecto de los desafíos de una industria más moderna que crece, y que debe estar más integrada al mundo”.

 En ese sentido, llamó al sector sindical a “tener una agenda de productividad”. Respecto a la “necesidad” de una reforma tributaria sostuvo que  “los empresarios no deberían estar preocupados”. “Tenemos un sistema tributario bastante antiguo y cualquier propuesta que hagamos será para modernizarlo, y favorecer la inversión”, justificó en diálogo con Radio Continental.

“Hay que darles un marco de crecimiento, inversión y de cumplimiento de leyes para que crezcan y generen empleo. Esa es la Argentina sobre la cual somos optimistas”, marcó sobre el rol de los empresarios del país.