Sólo 5 firmas acompañan el pedido de sesión especial previsto para el martes 20 de noviembre donde se busca dar tratamiento al desafuero y posterior prisión preventiva, de la senadora Cristina Fernández de Kirchner, ex presidente de la Nación, en el marco de la causa AMIA caratulada, “Timerman Héctor Marcos y otros sobre encubrimiento” por el Memorándum de entendimiento con la República Islámica de Irán.

Los firmantes son, el radical Luis Naidenoff, presidente del interbloque Cambiemos, los macristas Humberto Schiavoni y Federico Pinedo junto con la secretaria parlamentaria del interbloque, la tucumana Silvia Elías (Alianza Cambiemos)  y Julio Martínez, (Cambiemos Fuerza Cívica Riojana).

Aunque aún está en duda la posibilidad de tener el número necesario para llevar adelante la iniciativa solicitada por el Juez federal Claudio Bonadío, el oficialismo y sus aliados obedientes quieren dar curso al pedido antes de que se venzan los plazos reglamentarios. 

Bullrich, no hay que perder las esperanzas

El mismo día que se aprobaba el presupuesto 2019, el senador Esteban Bullrich anunciaba que se iba a fijar la fecha para la sesión, “el planteo no es que lo pedimos nosotros, el juez, (Bonadío)  pide el desafuero, hay un vencimiento y deberíamos tratarlo”, y agregó, “se va a fijar una sesión, esperemos tener quórum, no hay que perder las esperanzas”.

Dicha frase bien podría interpretarse como una clara expresión de deseo,  dejar a la ex mandataria fuera del escenario político para 2019, aunque aún no haya anunciado una posible candidatura, pero es indudable de que este gobierno piensa con futuro y no querrá para ese entonces, tener obstáculo alguno que pueda poner en peligro el proyecto PRO. 

Había que tapar el desastre que hicieron

El senador Marcelo Fuentes (FpV) estimó que, “no hay razón para el desafuero ni dentro de lo que se llama la doctrina de esto o de aquello, no hay ningún fundamento en una causa que se inicia como traición a la Patria y donde posteriormente pasa a ser encubrimiento y donde los imputados han quedado todos en libertad”

.Asimismo el senador neuquino subrayó, “la senadora permanentemente ha estado a derecho, ha concurrido al juzgado cada vez que se la citó, no hay peligro de fuga, no incide ni puede manipular la causa, lo que sí es evidente que en este sistema de persecución judicial que se puso en marcha, tiene que haber alguna autoridad judicial que ordene todo esto” y añadió, “la hicieron jefa en 5 causas de asociación ilícita y ahora aparece un juez que dice que no tiene nada que ver con la ruta del dinero, en otra causa comienzan a decir dónde está la plata, todo esto es una payasada”.

En la entrevista realizada por www.quorumdigital.net, el legislador acusó al gobierno de haber armado toda una estrategia, “en función de la debacle y las corridas,  tuvo la necesidad y precipitó una jugada que era para el año que viene, la jugada de los procesamientos se iba a poner en marcha sobre las elecciones, lo que pasa es que había que tapar el desastre que habían hecho y lo tiraron con bombos y platillos por los medios hegemónicos”.

Vimos robar  U$ 38 mil millones con la timba financiera

En este contexto Fuentes sostuvo, “en un momento de la evolución tecnológica como este, cuando hemos visto robar ahora 38.000 millones de dólares con el juego de la timba financiera, donde comprabas, ponías en tasa, la sacabas comprabas dólares, los mismos que iban a devaluar te avisaban “apurate flaquito que el lunes que viene devaluamos” y así se llevaron 38.000 millones de dólares, pensemos que ¿era posible llevarlo en bolsos?”. “Entonces como escenario de corrupción me digas que hay una organización delictiva,  donde el cerebro es Fariña, y que cada uno que roba se tiene que llevar encima el bolso cuando hoy basta con apretar un botón para transferir millones de dólares, entonces este es un cuento que tiene que terminarse, la gente no es sonsa”, manifestó el congresista.

Quórum

El senado necesita reunir los dos tercios para avanzar en el desafuero y posterior prisión preventiva de la ex presidente. Cambiemos no cuenta con la mayoría, tiene 25 senadores propios y se necesitan 37 para abrir el debate, por lo que ya, según trascendió, estarían hablando con sectores del peronismo.

Cabe señalar que Cristina Fernández no apeló la medida, lo que da lugar a su tratamiento en la Cámara alta.