El Gobierno pensó en sacar la reforma por decreto, pero dio marcha atrás
14 de diciembre de 2017
Al filo de la noche de este día agitado en el que el oficialismo fracasó en su intento de aprobar la reforma previsional en el Congreso, trascendió que el Poder Ejecutivo tendría la intención de impulsar la norma por la vía del decreto. La medida incluiría también un bono compensatorio para los jubilados, y todos los ministros habrían firmado el decreto.
La noticia trascendió al caer la tarde en la Casa Rosada, adonde concurrió presuroso el jefe del interbloque de Cambiemos, Mario Negri.
Fuentes oficiales consultadas no confirmaron ni desmintieron la posibilidad del DNU, pero aclararon que la medida era “legal”, lo que daba curso a la posibilidad de que la especie fuera certera. Incluso había trascendido que el presidente de la Nación utilizaría por primera vez la cadena nacional para dirigirse al país anunciando la medida.
Sin embargo, ante las reacciones contrarias de parte de la oposición y la CGT, y dentro del propio oficialismo, pudo saberse finalmente que la decisión había sido finalmente desechada.
Había reaccionado de manera contraria de inmediato la socia de Cambiemos Elisa Carrió, de gran protagonismo en la discusión de esta ley y en la fallida sesión de este jueves. A través de Twitter señaló que “Carrio y la Coalición Cívica juraron respetar la Constitución Nacional y no la van a violar bajo ningún concepto. Un DNU violaría gravemente la Constitución Nacional”.
La CGT también salió a rechazar de plano un eventual decreto. El integrante del triunvirato cegetista Héctor Daer expresó este jueves por la noche que “sería lamentable que cuando la política en el Congreso le dijo que no a esta reforma, se utilice el DNU para generar este acto de sustracción de los salarios de los jubilados. De suceder esto haríamos una acción directa de un paro a partir de las 0 horas”.
Otro diputado de la CC, Juan Manuel López, salió a rechazar la medida: “Como diputados no podemos convalidar un DNU en materia previsional. Confiamos en que entre Congreso, gobierno y gobernadores se puede encontrar la solución”, señaló.
El presidente del bloque FpV-PJ, Agustín Rossi, señaló por su parte que un decreto “sería una burla a todo el pueblo argentino”.
Según había trascendido, el proyecto que tiene media sanción del Senado iba a plasmarse con el mismo texto en el DNU, en tanto que se le agregaría un bono a pagarse en marzo, para facilitar el empalme entre la vieja fórmula y la nueva para aumentarle a los jubilados.
Carrió había empezado a cuestionar al Gobierno desde la tarde, caída ya la sesión. En declaraciones a radio La Red, la diputada deslizó, irónica, que “en este momento están todos reunidos en la Casa Rosada y yo me voy a Capilla del Señor".
No fue lo único que dijo. También advirtió que “se apuraron (con la reforma), había que discutirlo más profundamente, era lo que yo proponía”. No obstante apuntó que “yo pago el costo que no tendría que haber pagado, pero formo parte del Gobierno porque defiendo a la República. Estos ladrones no me van a quitar la república”.
En sus declaraciones, Carrió le pegó duro al kirchnerismo, al culparlo por los incidentes. “Siempre fueron patoteros”, dijo, e incluyó en sus críticas a Leopoldo Moreau, al que contó que “siempre le tuve asco. Cuando era radical, él quería confrontar conmigo. Yo le dije que no porque desde que había entrado a la UCRA tenía un asco personal indisimulable con él”