Massa prepara el terreno para avanzar en las sesiones on line
13 de abril de 2020
ARSAT y RENAPER le permitirán garantizar conectividad y certificar la presencia de los diputados, si se llegara al consenso para votar votara por teleconferencia.
Sergio Massa firmará esta semana un convenio con el Registro Nacional de las Personas (Renaper) y Arsat, la empresa estatal de telecomunicaciones, para dejar a la Cámara de Diputados en condiciones de sesionar por teleconferencia o que la utilicen al menos algunos legisladores que no puedan pisar el recinto.
Restaría un consenso sobre cómo es preferible retomar la actividad parlamentaria, que por ahora no fue posible, porque la oposición nunca dejó clara una propuesta uniforme sobre cómo reunirse y evitar contagios de coronavirus.
Si bien el diputado radical Alejandro Cacace presentó un proyecto para regularizar el voto online, el resto de Cambiemos no lo respaldó y hubo posiciones encontradas en las videconferencias.
El oficialismo puede conseguir una mayoría sin tocar la puerta del frente opositor más grande, pero tiene una complicación: para cambiar el reglamento se necesita una sesión presencial y en cuarentena no será posible reunir en el recinto a 257 diputados, taquígrafos y personal de seguridad.
La oposición está dividida. Mario Negri, jefe de la UCR y del interbloque Cambiemos, el primero en admitir que una sesión regular no es posible en estos tiempos, no avaló el formato online. Cristian Ritondo del PRO estaría de acuerdo pero cuando su bloque lo debatió por zoom varios pusieron reparos.
Temen que la computadora pueda ser usada para hacer algunas trampas y para evitarlo Massa firmará un convenio con el Renaper, que permitiría certificar la identidad de los diputados. Arsat garantizaría la conectividad de los 257 diputados desde el lugar del país que estuviesen, para que no haya ninguna ausencia al momento de votar.
No es ningún misterio: los parlamentos de la región y legislaturas del país votaron por teleconferencia con el sistema Zoom, que desde hace un par de semanas se utiliza en el Congreso para que expongan ministros en reuniones de Comisión, pero no es posible votar mientras no se retoque el reglamento.
En el oficialismo también es un sistema "híbrido", con algunos diputados en el recinto, sentados con varias bancas libres entre uno y otro, y el resto desde su casa con la PC en línea para votar. Entre los ausentes estarían los diputados de riesgo, por edad o historia clínica.
Otra alternativa sería buscar un salón más grande fuera del palacio que permita a los legisladores sentarse en forma espaciada, como hizo Diego Santilli para abrir la Legislatura porteña: mudó el recinto al salón de honor. Casi 300 personas solo podrían dispersarse en un estadio de fútbol y la opción que se escuchó en el Congreso es el de Argentinos Juniors.
Si hubiera un consenso por cualquiera de las alternativas, Massa podría resolver ese u otro esquema en una resolución presidencial, como ya hizo con la conformación de comisiones.
"En la democracia moderna, las tecnologías si juegan un papel central y tenemos que adaptar el Congreso al siglo 21 y no seguir utilizando mecanismos que son mas antiguos", pidió el presidente de la Cámara el jueves santo, al finalizar la presentación de Felipe Solá en la comisión de Relaciones Exteriores, por teleconferencia.
Todavía no lo escuchan. De hecho, la comisión de modernización creada para debatir cambios reglamentarios, fue conformada pero nunca se reunió y tampoco hubo un reclamo del oficialismo para acelerar los trámites.
Y la Comisión de Peticiones de Poderes y Reglamentos, presidida por la entrerriana Mayda Cresto, del frente de Todos, tampoco tiene fecha de teleconferencia para discutir estos asuntos. El consenso por ahora está lejos.