Massa y Randazzo le dan pelea a teoría del voto útil
21 de agosto de 2017
La falta de un liderazgo único le ha ocasionado al peronismo un problema que estas Primarias no alcanzaron a resolver. El ajustado resultado entre Cristina de Kirchner y los candidatos del oficialismo en la provincia de Buenos Aires, no le alcanzó a la ex presidenta para consolidar un rol protagónico dentro del justicialismo. Las últimas declaraciones de Miguel Angel Pichetto y Sergio Uñac dejaron en claro que ni el poder parlamentario del PJ ni buena parte de los gobernadores la tienen muy en cuenta para el futuro.
Sin dudas, los reacomodamientos que se produzcan en los próximos 60 días dentro del armado opositor a Cambiemos en territorio bonaerense signarán el destino no sólo de la elección de octubre, sino también de la conducción del espacio "peronista", hoy vacante.
Dirigentes cercanos a Florencio Randazzo -quien ayer participó de la celebración del Día del Niño en La Matanza junto a varios dirigentes sociales y el intendente de San Martín, Gabriel Katopodis- debieron salir a aclarar durante el fin de semana largo que la candidatura del exministro cristinista sigue en pie y que piensan honrar ese medio millón de votos que obtuvieron en una Primaria donde no disputaron ninguna interna y sólo se midieron contra sí mismos. La aclaración vino a cuenta de los rumores que señalan un resquebrajamiento del frente interno randazzista. "Mientras más de 40 listas comunales ya se le fueron y varios intendentes amenazan con dar el portazo, el armado territorial que lo sostenía (el Movimiento Evita) negocia -vía Jorge Taiana- con Cristina el traspaso a las filas de Unidad Ciudadana", sostiene un dirigente peronista de la Primera Sección electoral.
Claro que el massismo también deberá cuidarse de las posibles fugas si quiere ensanchar la todavía angosta "avenida del medio". Una fuente cercana a la gobernadora María Eugenia Vidal dijo que "Joaquín (de la Torre) está convenciendo a varios intendentes para que den el salto" y se recuesten sobre la generosidad de un oficialismo dispuesto a hacer valer el poder de la chequera. Sin embargo, varios jefes comunales renovadores se juntaron el martes después de las PASO y organizaron un encuentro para el próximo jueves en el que pretenderán dar una muestra de "lealtad" a su líder. Mientras disfruta de unos días de descanso en compañía de su familia, Massa debió pedirles a sus operadores que salieran a desmentir los rumores sobre una supuesta reunión entre el candidato a senador y el diputado Máximo Kirchner. "Están desesperados por teñirnos de kirchnerismo, pero no lo van a lograr", afirmaron fuentes massistas.
Números
Para los analistas, "si bien los votos de Massa y Randazzo en teoría son los más lábiles, los lábiles de Massa ya se le fueron", sostiene Hugo Haime. Según el consultor "el juego está abierto, ya que en las encuestas previas sólo un 20% de los votantes potenciales de 1País se mostraban dudosos entre Massa y Cambiemos y son los 4 puntos menos que ya tuvo hace una semana, mientras que en el caso de Randazzo la mitad decía dudar entre Massa y Cumplir y la otra mitad entre Randazzo y CFK".
En este contexto, Unidad Ciudadana y Cambiemos llamarán a un voto útil para reforzar el escenario de polarización y las otras fuerzas harán hincapié en la necesidad de darle una tonalidad multicolor al parlamento que quedará conformado a partir de diciembre. En cualquier caso está claro que hay un 30% del electorado en disputa (restando los 66/67 que suman oficialismo y cristinismo y el 3/4% del voto de izquierda) y hacia allí apuntarán los cañones los dos exfuncionarios de la candidata a senadora.