El avance de Emilio Monzó en la Provincia comenzó a detonar las primeras rupturas de Cambiemos en el Conurbano. Los armadores del ex presidente de Diputados ponen el foco en la tercera sección

A horas de que comience la sesión por el paquete de emergencias enviado por Axel Kicillof a la legislatura bonaerense, Cambiemos sufrió una nueva baja. Se trata de la diputada María Elena Torresi, quien comunicó su salida del bloque opositor mayoritario y a las pocas horas firmó su pase (con foto incluida) al espacio Cambio Federal.

Se trata de una nueva derrota legislativa para Juntos por el Cambio que, en lo que va los últimos 40 días, perdió ocho diputados y lo aleja de un Frente de Todos cada vez más consolidado. Para colmo, su salida se da en un momento clave, con la cámara en funcionamiento luego de meses parada, en un marco de discusión interna por el plan que envió el ejecutivo y con la oposición queriendo demorar su trato. "Nosotros no tenemos ningún apuro. Si podemos estirarla una semana más, lo vamos a hacer”, aseguró un diputado de Cambiemos.

Torresi, con mandato hasta 2021, llegó a la cámara en representación de la tercera sección. Casada con el dirigente Osvaldo Mercuri, acompañó a su hijo Gabriel en la aventura de ser candidato a intendente de Lomas de Zamora.

"Me incorporo a este espacio que continúa el proyecto de Cambiemos pero abre las puertas al intercambio de ideas, a la discusión política, a los debates, a los consensos y a los acuerdos como metodología para encontrar la mejor manera de transformar la provincia y el país", dijo Torresi en línea con sus aliados que abrieron una "corriente interna" pero todavía sin romper Juntos por el Cambio.

Con su incorporación a Cambio Federal, el bloque ahora pasa a tener cinco diputados y, según fuentes consultadas, podría sumar uno o dos más en los próximos días. Con Walter Carusso en la presidencia, la otra oposición cuenta además con la presencia de Fernando Pérez, Martín Domínguez Yelpo y Guillermo Bardón, todos dirigentes que responden a Gustavo Posse y Emilio Monzó.

El intendente de San Isidro y el ex presidente de la cámara de Diputados se unieron con la idea de generar una oposición diferente, con más diálogo con el oficialismo. Posse tiene claro que va por la presidencia de la U.C.R provincial para terminar con lo que internamente llaman “el radicalismo servil”, mientras que Monzó comienza a rearma la tropa para ver cuánto peso puede tener en la provincia de cara al 2021.

Con este nuevo cambio, la cámara quedó conformada por 45 diputados del Frente de Todos; 38 para Cambiemos, cinco para Cambio Federal; dos para 17 de Noviembre; y dos monobloques: FIT y Partido Fe.

Cambiemos en Lomas de Zamora y Florencio Varela tambien se desangra 

La incorporación de Torresi -que se venía gestando hace tiempo- se precipitó por lo que pasó el lunes en el Concejo Deliberante de Lomas, donde los ediles del PRO rompieron abruptamente con el bloque de su hijo Gabriel. La "traición" del macrismo hacia el más joven del clan terminó de rebalsar el vaso de la legisladora, que aprovechó para salir a marcar su propia distancia. 

Cuando Mércuri llegó el lunes a la última sesión del año, se encontró con que Silvia Sierra (PRO), Jorge Villalba (Coalición Cívica), la radical Graciela Andrada y el vidalista Gustavo Ganchegui le partieron el bloque sin previo aviso. Con él se quedaron los concejales Sandra Ferreyra, Diego Cordera y Andrea Escribano.

El panorama parecía el de un Cambiemos fracturado en dos bloques de cuatro. Pero dolido y rápido de reflejos, Mércuri logró sumar al radical César Bértoli (que conformaba un monobloque) y quedarse como el espacio mayoritario de la oposición. La jugada le valió para lograr un premio consuelo: retener el nombre de Juntos por el Cambio, ante la indignación de los macristas "puros" que llevarse con ellos el sello distintivo.

"Fue maltrato innecesario. En la última sesión del año nos vinieron a romper el bloque, sin charlar las cosas. Por supuesto que nos vamos a quedar nosotros con el nombre", se relamían con poco en la bancada de Mércuri, e ironizaban: "Nos hicieron una mala jugada pero ganó la política".

En el peronismo miran casi risueños a esos movimientos de la oposición de Lomas, donde Martín Insaurralde tiene la tranquilidad del quórum propio con un bloque de 14 concejales.

Desde hace años que Mércuri es el candidato local de Cambiemos, pero tras la última derrota en el vidalismo en el vidalismo buscaron aislarlo y ahora levantan la figura de Ganchegui, aunque no tienen referentes de peso. Saben que Sierra, que preside el bloque, en realidad responde a Jorge Macri, que trabaja en su propio proyecto para la gobernación.

Un escenario similar a la fractura de Lomas se puede dar en Florencio Varela, otro distrito clave de la tercera sección donde el peronismo también tiene una mayoría aplastante. No por casualidad es el municipio que eligió Monzó para volver a sus recorridas bonaerenses cuando decretó la caída de la "cortina de hierro" de Vidal, que durante años le prohibió bajar a la Provincia.

Monzó había organizado ese acto con el concejal local Maximiliano Bondarenko, que días atrás rompió con el bloque del PRO que lidera Pablo Alaniz en Varela para conformar "Unión por el Diálogo" junto a la radical Gabriela Mancuello. En las últimas horas, la concejal Marcela Loyola confirmó que se sumará a ellos.

Las migraciones en el Conurbano arrancaron con Federico "Pola" Tomasin en San Vicente y siguieron en Almirante Brown con la partida de Miriam Niveyro, que terminó su mandato en diciembre. En el monzonismo vaticinan movimientos en otros distritos.