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Sudamérica 2018: Conflictividad política y carrera electoral


08 de enero de 2018

Lic. Leandro Martinetti

El año que comienza, en Sudamérica, presenta un escenario con conflictos políticos y judiciales a la vista, sumados a transiciones y elecciones presidenciales

Finalizada una etapa de gobiernos denominados “populistas”, América del Sur afronta nuevos aires políticos. Los dos grandes del cono sur, Argentina y Brasil, experimentaron un giro rotundo en su política local.

Por un lado Argentina, luego de las elecciones presidenciales del 2015, dio por sentenciado el fin de los 12 años de gobierno kirchnerista y con ello se produjo un cambio de ejercicio de la cosa pública, una visión opuesta respecto del modelo económico, la política exterior, una postura menos confortativa de las primeras líneas de funcionarios de gobierno etc.

Por otro lado el caso brasilero representó lo que muchos analistas han denominado como “golpe institucional”. Poco después de electa presidente  Dilma Rousseff, durante el año 2015 fue acusada de violar normas fiscales y la ley presupuestaria. Luego de ocho meses, Dilma es destituida mediante el impeachment y asume en su lugar su vice y actual presidente Michel Temer promoviendo una ruptura institucional que trajo consigo un alto grado de conflictividad política, agravó la economía del país, generó mayor desconfianza de la población a la clase política brasilera etc.

Chile tuvo su proceso eleccionario para fines del 2017 en el cual dejó como ganador y sellado el retorno a Sebastián Piñera imponiéndose sobre el candidato de izquierda Alejandro Guiller.

El flamante presidente se topará con desafíos que tendrá que afrontar desde el primer día de gobierno: 1) La desigualdad: más de la mitad de los trabajadores percibe salarios por debajo de los U$S 545 y la línea de pobreza de una casa promedio es de U$S 645. A su vez el 1% de la población chilena concentra el 33% de la riqueza haciendo que el acceso a educación y a la salud sea limitado. 2) Educación: la presidente saliente, Michelle Bachelet, dejó abierto el debate sobre la reforma educativa y su gratuidad. 3) Salud: el costoso sistema de salud es otro punto a ser considerado por el gobierno de Piñera.

Con la finalización del mandato de Bachelet América Latina ya no cuenta con presencia femenina entre los presidentes actuales. Las otras presidencias fueron la de Cristina Fernández con sus dos mandatos cumplidos y Dilma apartada del poder por el impeachment.

Las elecciones generales en Perú que se llevaron a cabo en el 2016, dieron como ganador a Pedro Pablo Kuczynski por sobre la hija del ex presidente Alberto Fujimori, Keiko. El péndulo electoral en Perú suele acotarse a un breve recorrido entre la derecha y otra versión de derecha.

Recientemente, el actual presidente, logró evitar su destitución acusado de tener vinculaciones con el caso Odebrecht. Pudo salir airoso gracias al acuerdo con fujimoristas díscolos encabezados por el otro hijo de Alberto, Kenji Fujimori. El pacto fue la permanencia en el poder de Kuczynski por el indulto al ex presidente Fujimori. Ahora queda observar cómo podrá, el presidente reafirmado por el congreso, sortear su decrecimiento de la popularidad y la crisis política que tendrá que saber llevar. Un dato a favor y a tener en cuenta, en el aspecto económico, se espera para este año una fuerte suba del precio de cobre.

El caso ecuatoriano es caracterizado por dos conflictos, uno institucional y otro político. El primero consta de una acusación de asociación ilícita que pesa sobre Jorge Glas, hasta los primeros días del 2018 vicepresidente. Glas, de fuertes lazos con el ex presidente Rafael Correa, entró en prisión preventiva en octubre del 2017 salpicado por la mega causa Odebrecht señalado de recibir sobornos para la adjudicación de obras cuando era Ministro de Sectores Estratégicos entre el 2010 y 2012 (gobierno de Correa). El ex vicepresidente fue condenado a seis años de prisión y cesó en su cargo luego de tres meses de falta en sus funciones, según manda la Constitución.

El segundo conflicto, es de tinte político aunque también está relacionado con el anterior mencionado. Antes de las elecciones presidenciales del 2017 y hasta poco después de la asunción del nuevo presidente ecuatoriano existía una fuerte alianza entre ambos que fue destruida y en la actualidad sus consecuencias se ven reflejadas en la política interna: 1) La guerra fría política y constante ente Moreno y Correa 2) La prisión de Jorge Glas implica que se tenga que buscar un reemplazante para la vacancia de la vicepresidencia 3) El retorno (si es que alguna vez se alejó) a la arena política de quien gobernó durante 10 años con la expectativa de conformar su propio partido y disputarle el poder a quien fue su socio y heredero político.

En Bolivia el panorama político pasa por el tema “Evo 2025”. El actual presidente Evo Morales iría por su cuarto mandato a pesar de que la Constitución solo permite dos mandatos consecutivos. Sin embargo, el Constitucional habilitó a Evo a poder presentarse en las elecciones del 2014 acudiendo a la refundación de la Carta Magna en el año 2009.

En los intentos de continuar en el poder luego de su actual mandato, se convocó a un referéndum con el fin de que pueblo boliviano elija si permite una nueva reelección de Morales o no. La elección fue en contra de una nueva postulación de Morales para el 2020. De todos modos, y como jugada política, se presentó un recurso ante el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) avalado en la Convención Americana de Derechos Humanos sobre los derechos políticos para que esto se anteponga a la Constitución nacional y así poder presentarse a elecciones. Por lo que el sueño de “Evo 2025” se encuentra más latente que nunca.

Mapa eleccionario de cara al 2018.

Paraguay: Concluido el mandato del actual presidente Horacio Cartés, el choque electoral sería entre el tradicional Partido Colorado y la alianza apoyada por el ex presidente Fernando Lugo conformado por el Partido Liberal y el Movimiento Guasu con la alianza GANAR (Gran Alianza Nacional Renovadora). El candidato del Partido Colorado será Mario Abdo Benítez, triunfante de la primaria contra el delfín de Cartés, Santiago Peña. La fórmula de la alianza liberal será encabezada por Efraín Alegre. Ambos candidatos son críticos de las políticas adoptadas por el actual presidente.

Colombia: Se celebrarán elecciones legislativas y presidenciales con la atracción novedosa, luego del acuerdo de paz, de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) hoy denominadas Fuerza Alternativa Revolucionaria, mismo acrónimo, distinto nombre para su camino democrático. La participación del líder de las FARC, Rodrigo Londoño alias Timochenko está asegurada. Del resto de los candidatos es muy pronto para esgrimir un próximo ganador. Hay seis listas a presentarse las cuales pueden llegar a ser menos según posibles alianzas. Cuestiones políticas y los acuerdos de paz trazaron una línea divisoria entre quienes apoyaron los procesos de paz y los “uribistas”. Lo que sí está claro es que quien asuma deberá tomar las riendas y continuar con los acuerdos de paz con las guerrillas pequeñas que aún están en vigencia y además lidiar con cuestiones como la corrupción, el narcotráfico etc.

Brasil: La clave de estos comicios está en la justicia ya que aún se encuentra pendiente la resolución sobre si puede o no presentarse a elecciones Lula Da Silva. Su presencia modifica notablemente el desarrollo electoral ya que ocupa el primer lugar en todos los sondeos, a pesar de los escándalos de corrupción. Sin embargo se ve poco probable que el Partido de los Trabajadores (PT) pueda volver al poder sin la cara de Lula en las boletas. En la vereda de enfrente, también asediada por la justicia debido a los sobornos de Petrobras, se encuentra el gobernador de San Pablo Geraldo Alckmim del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) y Jair Bolsonaro militar retirado y anti -  Lula. El actual presidente Temer, por el momento, no se involucra en la carrera electoral pero habrá que estar expectante a su decisión. El espectro electoral comenzará a definirse una vez que el Tribunal Supremo se expida sobre el caso del ex presidente Lula Da Silva.

Venezuela: Luego de las represiones de las protestas que dejaron más de 100 muertes y en un contexto de crisis económica y escases, al parecer, habrá elecciones en Venezuela. Maduro ira por la reelección y la oposición tendrá que encontrar su candidato de la Mesa de Unidad Democrática (MUD). A su vez, desde el mismo chavismo surgió la figura de Rafael Ramírez, ex presidente de PDVSA para disputarle el poder a Nicolás Maduro. Se deberán tener en cuenta factores como la inestabilidad del país, los ataques políticos a la MUD, las sanciones internacionales y las dudas sobre la seriedad y objetividad de las autoridades electorales ya que estos puntos abren una incógnita de cómo se llevaran a cabo las elecciones.                                        

* Leandro Martinetti - Licenciado en Gobierno y Relaciones internacionales. Maestrando en Estrategia y Geopolítica.

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