El Jefe de Gabinete Marcos Peña, volvió a la escena mediática y opinó sobre la posible candidatura de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, así como también sobre el peligro que representa la economía en la campaña de Cambiemos y la interna con el radicalismo.

Para Peña, no hay dudas de que Mauricio Macri “va a ganar la reelección” y a su vez, indicó que una eventual vuelta al poder del kirchnerismo significaría una “derrota de los argentinos”, aunque descartó que pueda pasar.

"Nada bueno puede salir de volver a un modelo de absoluto fracaso, comparable con Venezuela en el uso del poder en beneficio propio. Estoy absolutamente convencido de que la gran mayoría de los argentinos no van a ir para atrás. En todos los temas estamos mejor que en 2015", se animó a asegurar uno de los hombres fuertes del gobierno.

Sin embargo, y al mismo tiempo, Peña aclaró que “hay que aprender a vivir con un tipo de cambio flotante”, tras la nueva corrida que disparó al dólar cerca de los 43 pesos.

El Jefe de Gabinete asumió que en la Casa Rosada todos están “tranquilos” y confían en el equipo del Banco Central y Hacienda, quienes aseguró que tienen todas las “herramientas” y la “capacidad” “para enfrentar un año de volatilidad".

De todas formas, a pocos meses del comienzo de las elecciones que pondrán a prueba la gestión del macrismo, Marcos Peña analizó tres perfiles de votantes. Lo curioso, es que ninguno de estos –para el propio Jefe de Gabinete- es un votante fiel de Cambiemos.

El primer tipo de votante según Peña es aquel que "sigue adhiriendo al kirchnerismo y que ve todo lo que ha pasado como un retroceso", el segundo es uno que "siente que, más allá de las dificultades" el Gobierno "honra los valores del cambio" y el tercero, aquel que "tiene más dudas y más peso en la cuestión de su metro cuadrado y su bolsillo".

"La discusión no es si estar mejor o peor, sino si pueden salir de la situación de falta de futuro y de esperanza y de mala calidad de vida en la que se encuentran hace mucho tiempo", manifestó para Clarín, sin dejar muchas certezas sobre cómo el país podría mejorar en una eventual reelección del presidente.

Por último, Peña opinó sobre la posible candidatura de Lavagna y sobre la interna en Cambiemos, que cada vez hace más ruido y genera turbulencias en el seno presidencial.

El funcionario chicaneó al explicar que “desconoce qué representa” el armado del ex ministro de Economía y que no puede opinar sobre “algo que no ocurrió todavía”.

En cuanto a la interna con el radicalismo que sacude Córdoba y amenaza con extenderse a lo largo y ancho del país, Peña quiso llevar tranquilidad manifestando que “todo se puede discutir en la mesa nacional de Cambiemos”. “Pero estamos convencidos de que hay que fortalecer la figura del Presidente, de que él es el candidato natural, y esa estrategia no sería una eficaz manera de sumar votos", cerró.

FRENO A VIDAL

Marcos Peña dejó en claro que Mauricio Macri es el único candidato a presidente del oficialismo y recordó las palabras de María Eugenia Vidal sobre que no usaría la gobernación como trampolín para llegar a la Rosada

"No tengo dudas de que es Mauricio el candidato que tiene que seguir gobernando este país", dijo el Jefe de Gabinete y allí aprovechó para elogiar a la Gobernadora por su "compromiso y coraje" y lanzó un mensaje a La Plata: "dijo que no iba a usar a la provincia como trampolín", aseguró.